Mirar con nuevos ojos
Una nueva mirada para salir a cambiar el mundo.
Es necesario mirar con nuevos ojos. La tarea lo apremia. ¿Pero a qué tarea nos referimos? Cambiar el mundo por supuesto. ¿O será que ya nos convencieron que todo está perdido y que eso es cosa de idealistas y revolucionarios ya extintos en esta era posmoderna? ¿No será que en realidad lo que sucede es que estamos demasiado cómodos con la idea de que no hay mucho que se pueda hacer? Esa comodidad sirve para que las cosas sigan como están. Y el problema es que ya naturalizamos la desigualdad, creemos que “el mundo es así” y poco o nada se puede hacer porque naturalmente “somos así”.
No estamos diciendo nada nuevo. Pero a veces es necesario recordar algunas cosas.Necesitamos un cambio radical, una nueva mirada que nos vuelva a sensibilizar, empezando por cuestionar principalmente nuestras pequeñas acciones cotidianas.Nuestros discursos y formas de manejarnos, aquellas cosas que ya aceptamos como fijas e inamovibles. Volver a ver a los que tenemos al lado.
Muchas veces hemos sentido la indignación ante la miseria y la pobreza, pero al día siguiente continuamos con nuestra rutina, como si nada. ¿Cómo es posible? ¿Estaremos tan adormecidos?Tal vez sea la hora de proponernos en primer lugar ir de lo micro a lo macro.Decidiendo hacer de nuestro quehacer diario un campo de batalla, dando así nuestro primer paso como sujetos revolucionarios.¿Y contra quién peleamos? Nuestro primer rival, el que nubla nuestra verdadera mirada, es la indiferencia, esta nos hace perder nuestra humanidad, insensibilizándonos. Nos hace olvidar que nosotros también estamos oprimidos y que vivimos trabajando para sobrevivir o a lo sumo subsistiren un sistema socialmente injusto, donde unos tienen todo y otros nada.
Los cambios sólo son posibles si creemos en ellos. Y sólo podremos creer si empezamos a materializarlos. Es que una vez que despertamos debemos “hacer carne” nuestras intenciones revolucionarias a través de acciones concretas. Pensemos una y otra vez qué está a nuestro alcance. Y no se trata de ser asistencialistas o solidarios sólo para dar “un poco” y volver al letargo. Por eso decimos que estos cambios deben ser revolucionarios, deben dar vuelta el tablero.
Estas nuevas prácticas serán las que nos abran la posibilidad de ver con otros ojos, unos no contaminados ni acomodados a ver este paisaje de espanto que es el mundo en que vivimos. Y entonces poder preguntarnos si eso que llamamos “vida privada” no es tan solo otra máscara, otra careta, que sirve para cegarnos y dejarnos congelados.
Una nueva corriente de opinión debe surgir, que contagie, que nos desborde y que sea clara: ser cómplices de este sistema, ya sea por acción u omisión no puede seguir siendo una opción.Debemos salir a pelear. La miseria y la desigualdad deben dejar de existir.
No es tarea fácil, implica esfuerzo y dedicación, y miles de obstáculos a vencer que intencionalmente están ahí para hacernos claudicar. Cuando esto pasa podemos sentirnos a desanimados o cansados, tentados a abandonar el barco y rendirnos a volver a la comodidad del “mirar para otro lado”. Pero en esos momentos siempre debemos recordar que no estamos solos, que somos millones con el mismo objetivo, y que sólo es cuestión de empezar a encontrarnos.
![]() |
"SI EL PRESENTE ES DE LUCHA, EL FUTURO ES NUESTRO |
Entendemos que estas palabras son incómodas, molestas, hasta invasivas y es que de eso se trata. Algo se tiene que sacudir. Que se mueva y que se agite hasta despertarnos.
Otra humanidad es posible, está en nuestras manos. Salgamos a luchar y a creer en cambiar el mundo nuevamente.
Mirar con nuevos ojos
Reviewed by AZULADO
on
12/08/2016 03:23:00 p.m.
Rating:

Comentá